El olor del océano
Todos quienes hemos ido alguna vez a la playa podemos decir que el océano tiene un olor característico. Un olor que algunos días está super presente, mientras que otros pasa más bien desapercibido. Un olor que algunos lo achacan al agua salada, otros a peces y otros a marisco, pero realmente el responsable es el Dimetilsulfuro. Pero... ¿de dónde viene?
Los organismos del fitoplancton utilizan el sulfato (una sal muy común en el océano) para formar el Dimetil Sulfonio Propionato (DMSP). Éste compuesto se cree que es muy importante para la supervivencia del fitoplancton a cambios en el ambiente como un aumento de la radiación ultravioleta, cambios en la temperatura o en la salinidad.
El DMS es liberado al océano cuando tenemos fitoplancton. Pero cuando el fitoplancton muere ( devorado por zooplancton o atacado por virus) se libera DMSP y DMS. Una vez tenemos el DMSP en el medio, las bacterias marinas lo pueden descomponer de dos maneras diferentes, este proceso se conoce como "bacteria switch".
Una vía es que las bacterias rompan el ion Propionato (que es rico en carbono) del DMSP para usarlo como alimento (carbohidrato), lo que produce DMS que vuelve a ser liberado al océano. Esta vía de descomponer el DMSP es la que nos interesa. La otra es usar el azufre del DMSP para formar aminoácidos, que son los componentes esenciales de las proteínas. Esta vía a nosotros no nos interesa ya que no forma DMS.
Una vez creado éste DMS, es consumido por bacterias o bien descompuesto por reacciones químicas estimuladas por la luz. De modo que menos del 10% del DMS creado en el océano llega a la atmósfera.
Pero ... ¿Por qué es importante que el DMS llegue a la atmósfera?
Una vez tenemos el DMS en la atmósfera, éste se descompone mediante reacciones químicas y nos deja partículas de sulfato, conocidas también como aerosoles. Estos aerosoles tienen dos efectos importantes. El primero es que reflejan radiación solar, de modo que hacen de barrera para la radiación solar que llega a la tierra. El segundo es que son núcleos de condensación para la formación de nubes, que a la vez reflejan la radiación solar. De modo que la presencia de sulfato en la atmósfera nos ayuda a que la tierra permanezca más fría.
Finalmente algunas de éstas partículas de sulfato vuelven al océano a través de las gotas de lluvia.
Y en este fantástico compuesto se basa mi tesis doctoral.
El DMS es liberado al océano cuando tenemos fitoplancton. Pero cuando el fitoplancton muere ( devorado por zooplancton o atacado por virus) se libera DMSP y DMS. Una vez tenemos el DMSP en el medio, las bacterias marinas lo pueden descomponer de dos maneras diferentes, este proceso se conoce como "bacteria switch".
Una vía es que las bacterias rompan el ion Propionato (que es rico en carbono) del DMSP para usarlo como alimento (carbohidrato), lo que produce DMS que vuelve a ser liberado al océano. Esta vía de descomponer el DMSP es la que nos interesa. La otra es usar el azufre del DMSP para formar aminoácidos, que son los componentes esenciales de las proteínas. Esta vía a nosotros no nos interesa ya que no forma DMS.
Una vez creado éste DMS, es consumido por bacterias o bien descompuesto por reacciones químicas estimuladas por la luz. De modo que menos del 10% del DMS creado en el océano llega a la atmósfera.
Pero ... ¿Por qué es importante que el DMS llegue a la atmósfera?
Una vez tenemos el DMS en la atmósfera, éste se descompone mediante reacciones químicas y nos deja partículas de sulfato, conocidas también como aerosoles. Estos aerosoles tienen dos efectos importantes. El primero es que reflejan radiación solar, de modo que hacen de barrera para la radiación solar que llega a la tierra. El segundo es que son núcleos de condensación para la formación de nubes, que a la vez reflejan la radiación solar. De modo que la presencia de sulfato en la atmósfera nos ayuda a que la tierra permanezca más fría.
Finalmente algunas de éstas partículas de sulfato vuelven al océano a través de las gotas de lluvia.
Y en este fantástico compuesto se basa mi tesis doctoral.
El olor del océano es importante porque contribuye en la formación de nubes, lo que a su vez contribuye en el efecto invernadero de la tierra.