Ya hace una semana que he pisado tierra y creo que ha sido el tiempo suficiente para aclararme las ideas...
Que ha significado la campaña para mí? Ha sido una experiencia espectacular que me ha recordado lo que me llega a gustar el mar; me gusta la física, la química, la biología y la geología siempre que vayan seguidas de las palabras "del mar". Me fascina como puedes verlas y estudiarlas por separado, como sistemas independientes que funcionan con sus leyes pero que a la vez desde la oceanografía las puedes juntar todas y ver como siguen los mismos patrones. Me ha encantado ver con mis propios ojos como a partir de los valores de temperatura, oxigeno y salinidad, Cèlia y Montse (nuestras biogeoquímicas) te decían cómo tenían que salir los perfiles de materia orgánica disuelta y en consecuencia la respiración de la columna de agua. Y lo mejor es que se cumplía, parecía magia! Me he dado cuenta de que somos unos privilegiados al poder vivir el mar de esta manera, de poder observarlo, escucharlo y estudiarlo. Me ha servido para ver lo orgullosa que estoy de haber estudiado lo que he estudiado, con fantásticos profesores, también amantes del mar. En general la campaña me ha aportado una visión global del trabajo que hacemos día a día en los despachos y laboratorios. Me recuerda lo grande y desconocido que es el océano, y todo el trabajo que tenemos por delante! No os engañaré, ni os diré que todo es fácil y maravilloso en el barco, ya que después de 20 horas seguidas trabajando empiezas a estar torpe y romper algún que otro erlenmeyer. Pero la verdad que son todas estas horas de trabajo y aprendizaje las que te hacen dar cuenta de todo lo que queda por explicar y que por mucho que nos empeñemos en bajar a profundidades abismales, es en superficie (primeros centenares de metros) donde se conectan los dos mundos (tierra y mar) y donde los procesos biológicos ganan importancia! Se que el 28 os dije que por la noche lo compensaría, pero fue llegar a puerto y dejar de funcionar el internet del barco. ¿Qué ha pasado durante estos días? Hemos estado 3 días en Santos, el puerto más grande de Suramérica (o eso dicen). Santos no es una ciudad turística, tiene un par de museos (museo de Pelé, museo del Café,...) pero poco más. Todos esperábamos sol y playa al llegar a brasil pero al ver el color del agua al acercarnos a la ciudad se nos quitaron las ganas, y por suerte el tiempo tampoco acompañaba. Además salir del barco fue más complicado de lo que pensábamos, llegamos a las 10 de la mañana a puerto, entregamos los pasaportes y sólo nos quedaba esperar a que nos los devolvieran sellados para poder salir del barco. Para asegurarnos que nos devolvieran los pasaportes contratamos con ellos mismos el transporte hasta el aeropuerto para el día 30. La espera fue larga y hasta las 6 no tuvimos los pasaportes de vuelta. Todos ya estábamos deseando llegar a casa, de modo que entre el encierro forzoso del 28 y que la ciudad no es muy turística, los días en Brasil no han sido espectaculares. ¡Por fin llegó el día 30, el día de volver a casa! A las 4 de la tarde nos recogieron en el puerto y nos fuimos directos al aeropuerto para coger el avión destino a Casablanca donde después de 2 horas de escala cogíamos el avión definitivo hacia Barcelona. |
MartaAmante del mar, de la ciencia y del mundo! más... |